Corta las pechugas en filetes no muy gruesos. Lávalas bien con limón y aderézalas con ajo picado, orégano molido y sal. Luego, estíralas todas sobre tu superficie de trabajo.
Ahora coloca una rebanada de jamón sobre cada pechuga y encima una de queso. Enrollas con cuidado para que no se salgan las lonchas y pincha cada uno de los enrollados con un palillo para sujetarlos y mantenerlos cerrados.
Coge un recipiente aparte y bate los huevos. En otro recipiente, coloca un poco de pan rallado. Hecho esto, pasa cada uno de las pechugas de pollo rellenas primero por el huevo batido y luego por el pan para rebozarlas. Después, pon aceite a calentar en una sartén y fríe todas las pechugas cordon bleu.
En otra sarten aparte, pon a calentar la mantequilla. Cuando se funda, agrega la leche entera, un poco de agua, un cubito de caldo de pollo y queso y deja que se cocine. Remuévelo para que seintegren bien todos los ingredientes.
Cuando la salsa esté lista, coloca todo el pollo relleno en un recipiente apto para horno y vierte la salsa sobre ellas. Deberás hornear las pechugas a la cordon bleu durante 30 minutos a 170°C.